En valenciano la expresión “fòc de palla” hace referencia a un fuego de efímeras llamaradas, que deslumbra pero que no calienta ni produce brasas. Un ser y no ser en segundos. “Fòc de palla, fòc de canalla” parece ser el refrán completo.
Estos días nos están vendiendo la recuperación económica que está por venir y que según los voceros del régimen superará las mejores expectativas, datos de aumento de cotizantes y un verano luminoso donde la posibilidad de vacunarse viajará con la tarjeta de desplazado. Todo bonito y soleado. Y volviendo al refranero valenciano cabría decir aquello de “A l`estiu, tot el món viu”. No se echan de menos unas brasas que nos calienten, hace calor, nos sobra con la paja. Las expectativas que nos vende el gobierno y sus palmeros nos deslumbran. Pero el invierno irremediablemente viene tras el otoño y va a hacer mucho frío. Pero seguimos confiando en el gobierno que nos ha mentido desde el primer día. Un poquito de paja de vez en cuando produce un resplandor que ciega especialmente a los que nunca quieren ver. El problema, que ya está ahí a pesar de nuestra ceguera, es que vamos a necesitar algo más que paja para pasar el invierno económico que viene y la solución del gobierno va a ser muy sencilla: tenéis que acostumbraros a pasar frío y os ayudaremos a no congelaros.
Y para ir abriendo boca ya tenemos en marcha la subida de impuestos (con el nombre que quiere ponerla la ministra Montero o el director general de Tráfico) y el cóctel del ministro Escrivá, que enumera todos los componentes (ninguno bueno para el futuro pensionista) sin terminar de decir que todos van a formar parte de la mezcla: Una parte de prolongar la vida laboral, una parte de manipular el periodo de cómputo, una parte de cálculo reductor y unas gotas de Angostura para la generación del baby boom (grandes cotizantes). Se agita un poquito, que no cuando manda el PSOE no hay que agitar, y ya está.
El cóctel se llama “Solidaridad intergeneracional” y será bajo en prestaciones, los bármanes: Gobierno, Patronal y Sindicatos (pequeños cotizantes). Solo van a protestar un poquito y bajito. No veremos manifestaciones de los Sindicatos. No sea que les “toquen lo suyo”. Mucho liberado de trabajar mientras quieren que un camionero o un albañil siga en el camión o andamio más allá de los 65 años o sea castigado si se prejubila.
El problema de las pensiones nadie lo puede negar. Existe un problema demográfico que no se va a solucionar con inmigración poco cualificada y en gran medida formada por perceptores puros de prestaciones. Pero no se puede exigir toda la solidaridad a los que llevan más de 40 años cotizando y pagando impuestos. Hay que comenzar a quemar leña y poner en marcha la economía real y no la de paja y subvenciones que nos quiere vender este gobierno. La subvención, a la que nos quieren acostumbrar, es un falso regalo que resulta amargo la mayor de las veces.
“Magraner fí, a vora camí, no será per a mí ”.
