
El “ayuntamiento móvil” de Sedaví se va. Igual que vino, se va. Sin pena ni gloria.
Los que pensaban que era una falla moderna tempranera se llevarán una sorpresa.
Para los que lo hemos visitado no nos queda duda que estaba más cerca del espectáculo que de la practicidad. Dos rampas de acceso a unas oficinas poco operativas.
“Eso no lo sabemos”, “mejor si lo hace por la Web”, “No, aquí no, en el Multiusos”, “No tengo muy claro eso que me pregunta”, “Creo que no”… son algunas de las respuestas típicas que recibía el ciudadano normalmente.
Aterrizó el monstruo cuando tenían el piso del “casino de la plaza” para montar la oficina. Más que autobuses galácticos lo que necesitan los afectados es funcionarios que funcionen e indemnizaciones y ayudas que lleguen. Pero en un pueblo en el que el alcalde retiene parte de la ayuda que envió Amancio Ortega al pueblo, ¿Qué se puede esperar?.
Daba mejor servicio el conserje a la puerta del ayuntamiento en la plaza, donde provisto de una libreta, nos consta que hacía seguir consultas y solicitudes. Una persona, una silla, una mesa y dedicación.
Como no podía ser de otra forma, en el despegue y retorno del autobús galáctico estaba la omnipresente Pilar Bernabé. Siempre en campaña. Y diciendo que el Gobierno va a dar 42 millones de euros para restaurar ayuntamiento, instalaciones deportivas, viales, etc. en Sedaví. 42 millones de euros para obras. Y nos lo dice Bernabé. Y nos lo dice como si estuvieran ahí, empujando los millones. Todo muy fácil. Y que duda nos cabe de la gestión efectiva y transparente.
No nos cansamos de repetirlo: recordemos que la restauración de la iluminación del puente o paso elevado sobre la pista de Silla, competencia del Ministerio, lo pagamos los sedavienses de nuestro bolsillo. Y también el suministro eléctrico. La razón era según Pilar Bernabé lo complejos y dilatados en el tiempo de los estudios de seguridad y medioambientales que requería reponer una iluminación que ya existía antes de robar el cableado de cobre.
¿Cuántos años de estudios van a ser necesarios para realizar obras por valor de 42 millones de euros? ¿Nos tomaba el pelo entonces o ahora? ¿O en las dos ocasiones?.
De momento el Sr. Cabanes lo que tiene que hacer es distribuir el dinero que no es suyo. Publicar los criterios de adjudicación de las ayudas y beneficiarios. Comenzar a devolver los IBIs como otros ayuntamientos y no dar más motivos para pensar mal.
Los 42 millones, ya veremos. Si vienen como las viviendas de Sánchez o cualquiera de sus promesas, vamos a esperar sentados.
Otros si que “llegan”. Llegaron las ayudas para los autónomos. Rápidamente. El empresario Juan Roig, demonizado por el Gobierno, volcado en la recuperación.
Obras son amores… y menos entrevistas.

La mañana del día 7 de febrero en el parque de el Rajolar de Catarroja.
Al pie del cañón.