Son los políticos de las MIL CARAS. Y todas duras.
Comenzando por la ministra de Ciencia (ministra NaOH), tan sosa como inútil, y terminando por el desafortunado (es tener mala suerte que te toque una riada), descolocado y despistado Mazón.
Por el medio queda el voluntario Baldovi (ayudando en casa de su “cuñao” y sobrina) del que no hemos visto ninguna foto peleando con el lodo y la diva Bernabé en permanente promoción y mintiendo más que Mazón.
La amiga Diana, en horas bajas, aunque nunca ha estado a la altura de sus cargos, pero que no desentonaba por el bajo nivel de los que le acompañan, viene como capataz de Sánchez a ver cómo está la finquita que quiere heredar y se ve obligada a “abrir la boca”. Craso error. Si no tienes nada que decir, no digas nada. Menos tonterías. Aquí te conocemos.
El “cuñao” de su “cuñao”. El “jeta” por antonomasia. Baldovi. Toda la vida viviendo del cuento. Un parásito en edad de jubilarse que quiere seguir chupando. Resentido, conocedor de sus limitaciones y más falso que un euro de cartón. Hay que leer entre líneas de su perfil en Wikipedia para conocerle. Si además te mueves por Sueca (y en los pueblos todos se conocen y saben de donde “vienes” y el pedigrí de cada cual) lo catalogas rápidamente. Vale la pena leer su perfil en Wikipedia.
https://ca.wikipedia.org/wiki/Joan_Baldov%C3%AD_i_Roda
Leer y comprender. Lo debe haber confeccionado (y corregido) el mismo, porque inconscientemente se retrata. Y sale muy mal retratado el Il.lustrissim Senyor. Afloran todos sus complejos.
La delegada, la número cuatro del PSOE, la secretaria de Igualdad…un bluff. Un montaje de Moncloa & Ferraz Prroductions. Sobreactúa tanto como miente. Y ya nadie cree en el personaje que intenta representar. No solo no es creíble, resulta grotesca. Por mucho que el progresismo haya apostado por ella como recambio inminente de la “científica”. Critica a Mazón por llegar tarde al Cecopi y ella llega 10 horas después de lanzada la alarma. Y descubre que es codirectora.¡ Uyy… que cabeza!
Y finalmente Mazón, que ha contado decenas de versiones de un tema que debiera importar poco. Aunque parece que a él sí que le inquieta. Donde estuviera, lo que comió, lo que hiciera en la sobremesa…debiera ser un tema menor. Lo grave es que parece que no era el único que no estaba en su puesto. Y en cuanto a los errores de sus subordinados, sí que van a su debe. Mucho político y pocos técnicos cualificados en los puestos claves. Y eso se paga con chapuzas como las de los trenes que no entran en túneles en Asturias y Cantabria o con desgracias mayores y muertes como las de la riada. Pero no se puede mentir, por mucho que los “progresistas” hayan institucionalizado la mentira. A alguien que se define de derechas no se le puede permitir.
Y puestos, en este paquete, deberían ir también la millonaria Ribera (la ausente), Marlaska, Robles y el jefe de todos estos.
A PASTAR FANG TOTS.