Yolanda Díaz está en campaña. Como no tiene ni ha tenido ninguna idea en su repeinada cabecita que haya generado riqueza y mejores condiciones a los trabajadores, ha recurrido a prometer aguinaldos y regalitos en función de la edad para votar. Lo que sería un intento descarado de compra de votos, con el dinero de los demás. 20.000 euros. ¿Quién da más?.
Pero parece ser que piensa que no es suficiente para que Sumar sume. Y en estos casos, siempre se puede recurrir al comodín de Franco. Como sacarlo del Valle de los Caídos (Cuelgamueros) ya no es posible, va a quitarle la medalla al Mérito en el Trabajo. Con ello, dice que “por fin se hace historia en España“. Hasta que llegó Yoli, España era un país vacío, sin Historia y los hispanistas no eran historiadores, eran autores de ciencia ficción. No se puede ser más lerda. O sí.
Los españoles, estábamos preocupadísimos porque figurara en un libro tal distinción. No solo lo conocíamos todos los españoles, además nuestra vida era un desasosiego pensando en ello. A partir de ahora todo va a cambiar. Todo va a ser más chuli. Nuestra vida mejorará y seguro que Franco No va a echar en falta la medalla. Todos contentos y felices. Se abre un nuevo horizonte en nuestras vidas.
Con la demolición de los pantanos y si la ministra Robles, desde su negociado, degrada a Franco al grado de cabo furriel, los problemas de este país se habrán acabado.
Si además Yoli crea 500.000 puestos de trabajo verdes, la repera. Mejor si son “verdes esmeralda” que “verdes las han segado” (o verde discontinuo).
Pero volvamos a Yoli y a Franco. A esta vividora, comunista, sindicalista de casta, que no ha pegado ni un palo al agua le debe chirriar solo pensar en la existencia de una medalla al Mérito en el Trabajo. No van muy de la mano sindicalistas y trabajo en estos tiempos. Pero que la tenga Franco, un dictador, es inadmisible.
Y es que a Yoli no le gustan todos los dictadores. No le gusta el general Franco, pero si los comandantes Chávez o Castro. Esos que han llevado la miseria y el hambre a su pueblo. Que tienen las cárceles llenas de presos políticos. Estos, sí que le gustan a Yoli. Son dictadores sangrientos, pero chulis, una pasada de dictadores, unos asesinos cuquis. ¡Dónde va a parar!
Esta hipócrita que en su programa lleva eliminar los vuelos entre capitales que tenga una alternativa ferroviaria, tiene la caradura de ir a Santander o Cádiz en el Falcon. A Cádiz para dar un mitin ecologista sobre Doñana. Quemando queroseno y enviando CO2 por toneladas a la atmósfera. ¡Ecochuli! .
Como la cantidad de modelitos, zapatos y peinados que estrena cada día. ¡Ecofashion!
¡Cuantas celebridades nos vienen de Galicia, y que bonita es!.
Además, después de en las mesas de los sindicalistas, es el sitio donde se encuentra el mejor marisco.