Antes de formar gobierno y comenzar a anunciar medidas, decíamos que Mazón era una incógnita que apuntaba buenas maneras. Conociendo “su casa” se anticipó a hilvanar los acuerdos con VOX que le permitieran formar gobierno rápidamente , interpretando la voluntad de los votantes de ambos partidos y anticipándose a presiones externas. Sin complejos ante el PP y sin complejos ante el resto de partidos. Con detalles de tolerancia hacia la oposición, cediendo un puesto en la Mesa de Les Corts a Compromís que el PSOE le negó. Mazón dice que no le gustan los cordones sanitarios. Ofrece continuar en el gobierno a cargos del Botánic sin mirar a que partido están afiliados. Como es el caso del director general de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, José Manuel García Duarte. Valora la eficacia y destierra el sectarismo tan arraigado especialmente en partidos de izquierda.
Consultado por su “innombrable” socio no tiene empacho en decir lo que piensa y no se arruga ante el discurso de moda. Ni considera racista, ni xenófobo ni machista a VOX. Punto. Se declara amigo y admira a Santiago Abascal con el que coincidió en el PP y piensa que Barrera va a ser un gran vicepresidente. Punto final.
Quiere bajar impuestos, que la gente disponga de más dinero para utilizarlo libremente.
Reducción de asesores, reducción de conselleries.
Solucionar el tema del agua. El de la infrafinanciación.
Actuar en Sanidad y dar libertad de elección en Educación.
Defender las señas de identidad y símbolos de los valencianos y no dejar que vengan de fuera a decir lo que somos o lo que tenemos que ser. Y que se acaban las subvenciones a estos amigos.
Todos sabemos que una cosa es prometer y otra cumplir con lo prometido.
Pero por algún motivo (y es fácil imaginar) da la sensación que se va a poner manos a la obra. Y conociendo, como hemos dicho, “su casa”, goteos y filtraciones, tendrá, como buen fontanero, que seguir anticipándose a las cuestionables decisiones de la Dirección de su Partido (Feijooy)
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Pero, ¿si Ayuso lo está consiguiendo, por que no lo puede conseguir Mazón?.
Por lo pronto, Ayuso estuvo en la investidura de Mazón y declaró:
“Empieza una nueva etapa en la que Madrid y la Comunitat Valenciana caminarán de la mano”
Esperemos que impere el respeto que se ha echado en falta por parte de Cataluña y del gobierno de Sánchez.
