Leemos en El Mundo que un juzgado de lo Mercantil da luz verde para emprender medidas legales contra los que vean partidos de fútbol mediante aplicaciones ilegales.
https://www.elmundo.es/television/2024/03/08/65eae3f3e4d4d8a84b8b45ca.htm
Los usuarios de aplicaciones pirata para ver fútbol de pago, según el juez podrían tener problemas. Las operadoras deberán facilitar el IP del equipo, el DNI, incluso la dirección de los que se hayan conectado a webs o a servidores ilegales.
Debe ser un error. O peor, visto lo visto, posiblemente lawfare. ¿La justicia contra la delincuencia?
¿Cómo se puede dejar en manos de la justicia un conflicto y la convivencia entre piratas televisivos que no quieren pagar a las empresas que pagan derechos e invierten en la difusión de partidos de fútbol?
La justicia no debe meterse. Ojito. Hay que dejar a la política la resolución de estos conflictos.
Lo lógico, salvo contados casos, es buscar una solución consensuada. Con el delincuente, claro.
Hay distintas soluciones para resolver este “conflicto”.
¿Se imaginan la tensión que sufren los usuarios ilegales de estas aplicaciones? ¿Nadie es capaz de ponerse en la piel de alguien que está viendo algo tan imprescindible como es un partido de fútbol y que se siente amenazado por un juez?
Una solución sería incrementarnos a los demás los impuestos y lo recaudado dividirlo en tres partes. Una para pagar a la operadora, la otra para pagar a los piratas y que puedan pedir un “Glovo” con una pizza y Coca Cola, y la tercera parte para un fondo para mascarillas del gobierno. Que nunca se sabe. Esta sería la solución genérica.
Habría casos particulares, como el de los piratas independentistas y corruptos a los que habría que asignarles una paga en aras de la convivencia y además traducirles la narración y comentarios al catalán, vasco o gallego. Y unas sardanas, un aurresku (sin lesionarse) y una muñeira en el descanso, tampoco estaría de sobra.
Otro caso particular, sería el pirata de webs que además es okupa. Un caso que necesitaría un tratamiento especial. Se trata de delincuentes, que acostumbrados ya no solo a no pagar la vivienda, ni la energía o el agua (a cargo del propietario), ni los tributos locales, ni las tasas por recogida de basura o alcantarillado. ¿Se imaginan la crueldad que supondría exigirles el pago por ver partidos de fútbol? Algo insoportable. En este caso, al dueño o dueña de la vivienda (aunque sea una anciana que le han ocupado la casa mientras estaba en el hospital) se le debe repercutir el coste del abono a la plataforma. Y por supuesto el coste del “Glovo” con la pizza y la Coca Cola. Hay que resolver conflictos.
Una cosa es que el gobierno permita ocupar la vivienda de forma ilegal y además castigar al propietario de la misma, pero el tema de la tele, el “furbo” y el pan y circo, es otra cosa.
Ojito. Que parece que hay un millón de estos piratas, y votan.
Todo sea por la convivencia señor juez.