Se dice que en 1519 Hernán Cortés quemo sus naves para evitar que algunos de los suyos se volvieran a Cuba. Parece ser que realmente no las quemó, sino que las hundió taladrándolas o desguazándolas para utilizar la madera, reservándose los aparejos de metal por si tenía que construir nuevas embarcaciones.
Cortés apostó por enfrentarse a Diego Velázquez, gobernador de Cuba y representante de la Corona, que no le autorizaba la expedición para conquistar nuevas tierras. Este desafío podía suponer la pena de muerte para Cortés y sus fieles. La única escapatoria era seguir con su empresa y conquistar tierras y tesoros para hacerse perdonar por el rey. De hecho, después de vivir durante un tiempo en las costas de Veracruz, los expedicionarios entablaron vínculos de amistad con pueblos enemigos de los mexicas (aztecas) y gracias a su apoyo y lealtad lograron la conquista del imperio mexica. Sin sus aliados la empresa hubiera sido imposible.
Cortés había roto con Diego Velázquez, pero apostaba todo por el éxito de su empresa y el reconocimiento de su soberano.
Carlos Mazón, candidato del PP a President de la Generalitat Valenciana se apresuró a firmar un acuerdo de investidura con VOX, escapando de las directrices que se anunciaban desde Génova 13. Con esta decisión “hundía sus naves” y emprendía una empresa junto a unos aliados que han demostrado sus ganas de unirse a la tarea común.
Parece ser que al “gobernador” Feijoo y algunos de sus “capitanes” les ha disgustado tal acuerdo.
También parece, que Mazón ha apostado por su empresa y por su soberano (el pueblo que le ha votado) olvidándose del “gobernador” Feijoo. Y que el acuerdo con VOX, va a suponer tener que seguir adelante con su programa, obligado (muy a gusto) por sus aliados. ¡Que bien que a uno le obliguen a hacer lo que desea!
En definitiva, esta decisión, que ha sido entendida por los votantes de ambos partidos mejor que por la dirección del PP, será juzgada en las urnas en su momento por sus votantes.
Seguramente, esta “quema de las naves” va a obligar al PP de la Comunidad Valenciana a aplicar las políticas que desea el votante “pepero” valenciano sin las decisiones distantes y acomplejadas a que tiene acostumbrado el partido a sus votantes. Posiblemente veamos dos formas de gobernar de los políticos del PP. Las de la Comunidad de Madrid, Andalucía y la Comunidad Valenciana (habrá que ver si se suma alguna comunidad más) y las de las comunidades del PP tuteladas por Feijoo y su cohorte.
Y sin duda, estas dos formas de entender la política se enfrentarán.
Cortés tuvo que luchar tanto contra los mexicas como contra otros españoles.