Ayer recibimos en el WhatsApp uno de tantos escritos que te pasan para que lo leas y reenvíes.
No es nuestra costumbre leerlos y mucho menos reenviarlos, pero esta vez, sin motivo alguno, comenzamos a releer algunas líneas, y después de estas, otras hasta leer todo el texto. Por las referencias históricas es posible que no se trate de un texto actual, pero nos parece que sigue tan vigente como si se hubiese escrito ayer. Pasamos a reproducirlo, sin modificación alguna, por cuanto pensamos que su lectura debería movernos a todos a una posterior reflexión sobre nuestro país y nuestras vidas.
“1.- Algunos creen que en España aún existen socialdemócratas, conservadores o liberales, pero se equivocan en gran parte. El Estado Español es una estructura de saqueo y expolio a las clases medias, con un sistema impositivo cuyo único objetivo es robar todo lo posible a la parte productiva de la sociedad.
2.- El sistema impositivo explota, saquea y roba con un impresionante despliegue técnico, humano y propagandístico. En Hacienda están los mejores profesionales, tienen los mejores ordenadores, el resto de la administración son servicios auxiliares de Hacienda.
3.- El dinero recaudado va, fundamentalmente, a dos grupos: una clase dirigente y a una red clientelar de electores que le da soporte.
4.- Esas clases privilegiadas: partidos políticos, sindicatos, altos funcionarios y algunas grandes empresas, tienen por objeto maximizar el expolio, mientras se desprecia y se subestima el propio sistema productivo.
5.- Se desprecia al empresario de éxito, se entorpece la innovación y se impone un esquema de valores en el que el enriquecimiento honrado es moralmente criticable.
6.- El desarrollo del régimen actual nace en los 80 con el PSOE. Sus primeras acciones se orientaron a invadir el sistema educativo, inflar la administración, dar a los políticos el control de las cajas de ahorro, mientras desindustrializaba el país.
7.- A la vez se diseña un sistema para que los políticos continúen cobrando de los consejos de administración de las grandes empresas, que en muchos casos sirven de enlace con la clase política.
8.- De 800.000 funcionarios se ha pasado a casi tres millones y medio, de los cuales sanidad y educación representan un millón doscientos mil, con una clara inflación de centros universitarios, mala calidad educativa y un gasto sanitario por habitante más bien bajo.
9.-El PP, cuando toma el poder, no desmonta todo el aparato de saqueo que se encuentra, sino que se aprovecha de él, simplemente toma el relevo.
10.- A todo esto hay que añadir un cuarto poder: los medios de comunicación, que en la práctica no es más que un formidable aparato propagandístico de una clase en la que el sentido crítico, el análisis imparcial y la objetividad han desaparecido por completo, mientras toma su parte de los presupuestos públicos.
11.- Como el dinero que da la economía del país se queda corto, se ha ido generando un enorme endeudamiento público, que pone al país a merced de sus acreedores y absorbe el ahorro privado.
12.- El español medio, un auténtico ignorante político, permite que se utilice su dinero en pagar toda una maraña corrupta, que en buena medida está orientada a engañarlo.
13.- Nos quieren hacer creer que corrupción es solo meter la mano en la caja, pero no es así: fundaciones, organismos inútiles, cargos absurdos y redes clientelares representan muchísimo más dinero y tienen un objetivo igual de abyecto, o más, que el robo.
14.- El elemento más obsceno de la corrupción del sistema, es el manejo de los medios de comunicación públicos y el permanente soborno a los medios privados, junto con la galopante degeneración y uso propagandístico del sistema educativo.
15.- Las autonomías no se han orientado a una mejor gestión. Su prioridad, excepto puntuales excepciones, es la manipulación de los medios de comunicación y de las mentes vía sistema educativo. En las autonomías más identitarias, esto es mucho más evidente: lavado de cerebro a costa de lo que sea.
16.- Los costes de todo esto son enormes: un sistema productivo menguante y una productividad estancada desde hace 15 años.
17.- España va alejándose poco a poco de los niveles de renta de los cinco grandes de la Unión Europea.
18.- La corrupción y la mala gestión se ve a simple vista, si sabes mirar. La carestía de la vivienda, la alta factura de la electricidad, la falta de oportunidades, la inflación de leyes, la pesada burocracia, la poca innovación o los salarios bajos son fruto del saqueo.
19.- El deterioro de lo que se ha dado en llamar ‘el contrato social’, es clamoroso. Escasea ya la igualdad frente a la ley, la protección de la propiedad privada, igual que la presunción de inocencia.
20.- Defender la igualdad frente a la ley llega a ser un acto de subversión.
21.- El Estado ya se inhibe de los elementos más elementales de los principios hobbesianos y se preocupa solamente de sí mismo y de como distraer a los aún crédulos del inmenso saqueo bajo el que están sometidos.
22.- La ecología, la desigualdad, el feminismo, las acusaciones de fascismo,… no son más que cortinas de humo que intentan generar una respuesta emocional y, por tanto, un tanto irracional.
23.- Se evita un análisis racional y por eso llenan las televisiones de tarascas, verduleras y gañanes que se desvían poco del insulto y el juicio de valor. El análisis racional ha sido totalmente desterrado, ni un solo intelectual tiene hueco ya en los medios.
24.- Si queremos encontrar un modelo o algo similar a la España actual, solamente hay que mirar a Argentina. Si no estuviéramos en el euro los niveles de inflación serían galopantes.
25.- Así que aquí estamos, hasta que no nos sacudamos a esos parásitos de encima seguiremos en una sociedad mediocre, irrelevante y continuará el deterioro económico y social.“
En Sedaví 1 de Febrero de 2021